Empresas sancionadas por formar parte de un presunto cártel que alteró el mercado del hormigón en Asturias durante tres lustros se preparan para recurrir ante los tribunales de lo contencioso-administrativo las sanciones impuestas por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). Oficialmente, las compañías consultadas no hicieron ayer comentarios. No obstante, ha trascendido que varias de ellas creen particularmente "injusto" que la CNMC también haya considerado como prácticas anticompetitivas la constitución de uniones temporales de empresas (UTE) para el suministro de hormigón a proyectos como la construcción del Hospital Central Universitario de Asturias (HUCA). La CNMC entiende que esas uniones no estaban justificadas y que fueron constituidas para manipular el mercado. Las empresas sostienen que son totalmente legales y que su formación se justificaba, entre otras, por razones logísticas.