PSOE y PP cerraron esta tarde la reforma del impuesto de sucesiones y donaciones en Asturias. La consejera de Hacienda, Dolores Carcedo, y la portavoz del PP en la Junta, Mercedes Fernández, limaron las discrepancias que había en el tratamiento fiscal de las herencias de empresas y en la rebaja de tipos en donaciones.

La reforma tendrá carácter retroactivo con fecha a 1 de junio de 2017. PSOE y PP han acordado elevar de 200.000 a 300.000 euros la reducción de la base imponible que desde enero está vigente para el impuesto de sucesiones cuando quienes heredan son los familiares más directos (descendientes, ascendientes y cónyuges) e introducir cambios en la deducción sobre el valor de la vivienda habitual del fallecido para reducir de diez a tres los años durante los cuales el heredero queda obligado a mantener el inmueble en su propiedad.

En los puntos más discutidos finalmente hubo acuerdo. Con respecto a la reducción de la tarifa de donaciones se pasa de 16 a 7 tramos y os tipos pasan de oscilar entre 7,65%-36,5% al 2%-36,5%.

En cuanto al fomento de la continuidad o la creación y ampliación de empresas se acordó aplicar una reducción del 99% a las transmisiones de explotaciones agrarias, ganaderas y forestales; se amplía la reducción en un 4% adicional en las transmisiones de empresas, negocios o participaciones en entidades, cuando se cumplan una serie de requisitos; se elimina el límite del valor de la empresa que antes se exigía, que era de 5 millones de euros; se reduce el plazo de la obligación de mantener la empresa, negocio o participación, que pasa de 10 años a 5 años; se aplicará una reducción del 95% cuando un trabajador adquiera una empresa individual o un negocio profesional y vaya a continuar con la actividad (independientemente de que sea familiar o no del causante y cuando lleve 10 años trabajando en la empresa) y se aplicará una reducción del 95% en aquellas herencias o donaciones que vayan a ser destinadas por el beneficiario a adquirir, constituir o ampliar empresas.