Las herencias de los asturianos generaron el pasado año unos derechos de recaudación en favor del Principado de 125 millones por el impuesto de sucesiones. Es una cantidad inferior a los 139 millones previstos en los presupuestos prorrogados.

La consejera de Hacienda, Dolores Carcedo, destacó ayer, por otra parte, que el Principado cerró 2016 con un déficit del 0,49% sobre el PIB, por debajo del límite permitido (del 0,7%), y con un endeudamiento del 18%, también dentro de lo establecido y por debajo de la media nacional (24%).

Además, la ejecución presupuestaria del año fue del 96,7% en lo referente al gasto, el porcentaje más alto de la serie histórica, destacó Carcedo. Fue así pese a que 2016 fue un año convulso marcado por la prórroga presupuestaria, lo que provocó la demora en muchas inversiones, añadió. Respecto a la inversión, Carcedo apuntó que se habían destinado 226,2 millones, lo que implica una ejecución del 76% sobre lo inicialmente previsto.