La Administración central derivará recursos extra hacia la Seguridad Social mediante un préstamo para asegurar el pago de las pensiones. El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, no quiso precisar la cuantía de ese préstamo, pero afirmó que "está garantizado el pago de las pensiones, incluidas la extras".

El citado préstamo suplirá las aportaciones del Fondo de Reserva de la Seguridad Social. Esta bolsa, a la que le quedan unos 16.000 millones de euros, se agotaría este año si el Gobierno vuelve a recurrir a ella para complementar el pago de la nómina de los pensionistas en junio y diciembre. Aunque hay discrepancias en el seno del Gobierno sobre la forma de tapar los agujeros, parece haber prevalecido la opinión de quienes, como la ministra de Empleo, Fátima Báñez, quieren evitar el coste político que supondría agotar por completo la "hucha" de los pensionistas. El propio Ejecutivo prevé para este año otro fuerte déficit en la Seguridad Social (1,4% del PIB, más de 15.000 millones), pese a la intensa creación de empleo que también espera