El consejero delegado de Liberbank, Manuel Menéndez, hizo este miércoles, durante la junta de accionistas del banco celebrada en Madrid, un diagnóstico sobre la situación del sector financiero en el que subrayó su "débil rentabilidad", derivada del prolongado período de bajos tipos de interés y del modesto nivel del negocio crediticio, lastrado por el proceso de desendeudamiento de los hogares y de las empresas. Menéndez destacó también el profundo ajuste de capacidad que el sector ha protagonizado desde 2008, con una reducción del 37% en el numero de oficinas y del 30% en el personal.

El primer ejecutivo de Liberbank y antes presidente de Cajastur expuso que en 2017 se completarán los planes comerciales y de transformación de oficinas del grupo. En una junta sin referencias a posibles fusiones bancarias, Manuel Menéndez mostró su confianza en que las acciones de Liberbank prosigan su mejoría este año, en el que se han revalorizado el 14% después de haberse desplomado el 43,59 % en 2016. Liberbank ganó 129 millones en 2016, tras provisionar 136 millones para hacer frente a los pleitos de las cláusulas suelo.