El juzgado ovetense donde se han concentrado todas las demandas civiles que se interponen en Asturias por cláusulas suelo, gastos de tramitación y otros casos relacionados con los contratos hipotecarios de personas físicas registró entre el 1 de junio y el día de ayer un total de 189 procedimientos, lo que equivale a algo más de 60 demandas a la semana, según informó ayer el Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA).

El "superjuzgado" para los hipotecados "funciona con total normalidad, pudiendo asumir hasta el momento las demandas presentadas con los medios de los que dispone", indicaron fuentes del TSJA. La sala está dirigida por el magistrado Antonio Lorenzo Álvarez. En estos últimos días, la dotación de personal se ha reforzado con el nombramiento de una jueza de adscripción territorial, como parte del plan previsto por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) para este tipo de juzgados especializados en la litigiosidad hipotecaria.

Por lo común, cada juzgado ovetense de primera instancia venía registrando unos doscientos procedimientos al año por demandas hipotecarias de personas físicas contra entidades financieras. De modo que el nuevo juzgado único ha recibido en tres semanas casi tantos casos como la carga anual de una sala ordinaria.

Pese a ese movimiento, el nivel de litigiosidad no alcanza por el momento los niveles que presagiaban las asociaciones de consumidores y despachos jurídicos. Algunas de esas organizaciones manejan centenares de reclamaciones que aún no han llegado ante los jueces porque están pendientes de la respuesta de los bancos, dentro del procedimiento extrajudicial habilitado para los casos de cláusulas suelo.

Según las opiniones recabadas entre los letrados, una mayoría de reclamaciones están siendo rechazadas por las entidades financieras o respondidas con ofertas de devolución insuficientes. El Tribunal de Justicia de la UE determinó meses atrás que, en el supuesto de que las cláusulas sean consideradas abusivas -porque no aparecen correctamente reflejadas en el contrato o no se informó con detalle de ellas al prestatario-, el cliente tiene derecho a la devolución completa de todas las cantidades abonadas de más desde la firma de la hipoteca.

Las cláusulas suelo fijan un tope por debajo del cual no baja el interés de los préstamos variables aunque lo haga el euribor, índice de referencia. Los bancos blindaron de ese modo la rentabilidad de las hipotecas en un contexto de tipos de interés extraordinariamente bajos.