El grupo alemán Klöckner Pentaplast, especializado en la producción de embalajes y envoltorios de plástico, ha culminado la adquisición de la compañía británica Linpac, que opera en el mismo sector y cuenta con tres fábricas en Asturias, todas ellas en el municipio de Pravia, en las que ocupa a unas 400 personas y produce envases de plástico para productos alimentarios frescos.

Con la unión de ambos grupos, participados en ambos casos por el fondo inversor estadounidense Strategic Value Partners (SVP), la organización resultante será uno de los líderes mundiales en el mercado del envasado flexible y rígido, con ventas anuales de más de 2.000 millones, 32 sedes en 18 países y 6.300 empleos. En España, donde Klöckner ya poseía una fábrica en Gerona, el grupo resultante será el segundo fabricante del sector, con ventas de casi 170 millones.

La consumación de la compra de Linpac por Klöckner, que se había pactado en abril, se materializó esta semana tras obtener la operación las autorizaciones de los organismos de Competencia.

Según los términos del acuerdo, Wayne Hewett, director ejecutivo de Klöckner, dirigirá el conglomerado y el hasta ahora consejero delegado de Linpac, Daniel Dayan, encabezará su división de alimentos. Dayan afirmó en abril que la unión permitirá "acelerar significativamente la expansión geográfica de Linpac", particularmente en América.

Klöckner es un grupo especializado en la producción de embalajes y envoltorios de plástico para el sector farmacéutico, electrónico, de bienes de consumo, de la impresión y de las aplicaciones especializadas. También opera en el ámbito alimentario, en el que Linpac está especializado.

El fondo SVP, que controla a la alemana Klöckner desde 2012 y que se hizo con el 88% de Linpac en 2015, había puesto a la venta esta compañía británica en noviembre, pero en febrero desistió y anunció su potenciación. Dos meses después pactó su integración en el grupo germano.

Con este cambio de titularidad, las plantas asturianas (dos situadas en la localidad praviana de Quintana y una en la de Vegafriosa, en las que se producen bandejas de poliestireno expandido y envases cerrados de material transparente) cambian de propietario por cuarta vez. La compañía que puso en marcha este grupo fabril en 1989 (la asturiana Terpla) fue adquirida por Linpac mediante sucesivas compras de acciones que culminaron en 2006. En paralelo, la familia Cornish, fundadora de Linpac, vendió esta empresa al fondo de inversión Montagu Private Equity en 2003. Y en 2009 la banca acreedora tomó el control de Linpac hasta su venta en 2014 a SVP. De esta última venta fue desagregada la factoría de bolsas de papel que Linpac tenía en Cañedo (Pravia) y que fue adquirida en 2015 por la alemana Papier Mettler.