El Principado ingresó en la primera mitad del año 50,2 millones de euros por el impuesto sobre transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentados, muy pegado a las variaciones del mercado inmobiliario. La recaudación por este tributo, que grava entre otras operaciones las compraventas de viviendas de segunda mano y la constitución de hipotecas (en su versión de actos jurídicos documentados) se ha incrementado el 10,4% (casi cinco millones) respecto al período enero-junio de 2016, según los datos comunicados por el Gobierno asturiano al Ministerio de Hacienda.

Ayer se conocieron nuevos que corroboran que el mercado inmobiliario va tomando oxígeno en Asturias. La región contabilizó en junio la compraventa de 654 viviendas, lo que supone un aumento del 18,3% respecto al mismo mes del año pasado. El incremento es más contenido que el registrado en el conjunto nacional, que fue del 19,3%. En el Principado se vendieron en junio 77 viviendas por cada 100.000 habitantes, por debajo del país que se situó en 120. La gran mayoría de las viviendas que se vendieron en la región fueron de segunda mano. Fueron 516, el 79% del total. Es el segmento que está tirando por el mercado.