La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La pensión media de los nuevos jubilados cae por debajo de los 1.600 euros en Asturias

La crisis y las reformas erosionan las prestaciones | Persiste la brecha de género: las mujeres cobran el 48% menos

La pensión media de los nuevos jubilados cae por debajo de los 1.600 euros en Asturias

Los nuevos jubilados asturianos siguen entre los que se retiran con retribuciones más elevadas, pero la crisis y las reformas en el sistema público están pasando factura al menos a una parte de esos nuevos pensionistas. Este año, la retribución media de quienes se jubilan es de 1.588 euros mensuales brutos, la cantidad más baja desde 2009.

La pensión media de los nuevos jubilados adscritos al régimen general de la Seguridad Social desciende este año el 1,4% respecto a la de 2016. Lo hace tanto para los varones como para las mujeres, entre quienes, además, se mantiene un intensa diferencia de retribuciones: las asturianas se están retirando con pensiones medias de unos 1.200 euros, un 48% más bajas que las de los hombres (casi 1.800).

La tendencia declinante en la cuantía de las jubilaciones expresa los efectos de la crisis sobre las cotizaciones de los trabajadores y también los que haya podido tener la reforma del cómputo que entró en vigor en 2013. Los despidos de la crisis condujeron a que un número difícil de precisar de trabajadores tuvieran que jubilarse prematuramente, sufriendo penalizaciones en el importe de la pensión en el momento de retirarse. En otros supuestos, los recortes salariales redujeron las bases de cotización sobre las que se calcularla llamada base reguladora y a partir de ella la prestación.

El impacto de las reformas procede de los cambios aprobados por el Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero. A la vez que se decidió elevar la edad legal de jubilación de manera progresiva hasta los 67 años, se incrementó de forma gradual el número de años de la vida laboral que se consideran para calcular la remuneración del pensionista. En 2017, la pensión se fija teniendo en cuenta los 20 últimos años de cotización, cuando en 2012 se tomaban 15. Este cambio puede tener efectos de signo dispar: reducir la cuantía si, como suele ser habitual, en los ejercicios más antiguos el trabajador tuvo bases de cotización más bajas (por tener un empleo peor o una categoría profesional más baja); también puede contribuir a mejorar la pensión en los casos de los trabajadores que, en situaciones de crisis como la de estos años, ven reducidas sus cotizaciones por despidos o ajustes salariales.

Compartir el artículo

stats