Arcelor-Mittal ya fabrica en Asturias raíles de hasta 108 metros de longitud con los que competirá, con mayores garantías, en el exigente mercado ferroviario mundial. La multinacional siderúrgica acaba de completar las obras de modernización y ampliación del tren de carril de Gijón, valoradas en cerca de 30 millones de euros, y desde el lunes está realizando pruebas de laminación en caliente para retomar la producción comercial el próximo día 11.
Durante el pasado verano, Arcelor-Mittal reemplazó las cajas de laminación del tren de carril y coincidiendo con la parada estival de este año se iniciaron, el pasado 12 de agosto, las obras de la segunda fase de la remodelación, que incluyeron la ampliación de los enfriaderos, la instalación de una nueva sierra en frío, el desplazamiento de la cabina de inspección y la instalación de una nueva máquina de ultrasonidos para controlar la calidad del producto. Estas obras -en las que participaron hasta 150 operarios de 20 empresas- ya concluyeron y fuentes de Arcelor-Mittal señalaron que desde el lunes se están realizando pruebas de laminación en caliente para realizar los ajustes necesarios para reiniciar la producción la próxima semana.
Con las reformas llevadas a cabo, las instalaciones de Veriña tiene capacidad para fabricar raíles de hasta 108 metros de longitud frente al anterior tope de 90 metros, lo que permitirá al taller gijonés competir con mayores garantías en el mercado europeo del ferrocarril, donde hay plantas capaces de producir raíles de hasta 120 metros de longitud. A más metros, mayor facilidad en las labores de construcción de las líneas y menos soldaduras.
La ralentización en el desarrollo de la red de alta velocidad ferroviaria en España ha obligado a Arcelor-Mittal a enfocar el tren de carril de Gijón hacia el mercado exterior. El Adif ya no es el principal cliente y en estos momentos la mayoría de la producción se destina a los ferrocarriles públicos de Alemania e Italia. El pasado año, Arcelor-Mittal logró la adjudicación de un contrato de suministro anual de 147.000 toneladas de raíles -equivalente a 2.500 kilómetros lineales- hasta 2018 para Deutsche Bahn, la empresa nacional de ferrocarriles de Alemania. Las factorías de Arcelor en Gijón y Dabrowa Gornizca (Polonia) están atendiendo los pedidos. Estas mismas plantas también fabrican carril para Rete Ferroviaria Italiana (RFI), la propietaria de la red de trenes de Italia, que el pasado año adjudicó a Arcelor-Mittal el suministro en dos años de 32.000 toneladas de raíles para la renovación y mejora de la red.
La inversión de cerca de 30 millones de euros para ampliar el tren de carril de Gijón completa un paquete de actuaciones valoradas en más de 100 millones de euros para modernizar las plantas asturianas que incluyó también la primera fase de la reforma de la acería LD-III de Avilés. La ejecución de la segunda fase está pendiente del visto bueno del comité de inversiones de la multinacional, que se reunirá a finales de este mes.
