La venta de Itínere, el segundo mayor concesionario de autopistas del país y propietario de la autopista del Huerna, estará en suspenso entre unos seis y ocho meses como consecuencia de la disputa que mantienen sus accionistas en cuanto a la venta de sus participaciones en la compañía.

Se trata del tiempo que se estima se prolongará el arbitraje que hace unos meses instaron Sacyr, Kutxabank y Abanca contra el fondo estadounidense Corsair Capital con el fin de superar el rechazo que esta entidad mantiene a que los otros tres socios vendan sus participaciones en Itínere, que suman un porcentaje mayoritario del 55,4% de su capital. Así lo indicó el director general financiero de Sacyr, Carlos Mijangos, quien confía en que el mercado mantenga en ese tiempo el interés manifestado por la compañía de autopistas, dada la recuperación que el sector registra en España. El grupo Globalvía se había impuesto al interés mostrado por fondos internacionales.