La aerolínea de bajo coste Volotea ha decidido trasladar su sede social desde Barcelona a Asturias, ante la incertidumbre política generada por el desafío secesionista en Cataluña. El consejo de administración de la compañía, presidida por Carlos Muñoz, justificó hoy esa decisión por la necesidad de "garantizar el desarrollo de la actividad en el marco y bajo la supervisión de las autoridades aeronáuticas europeas".

Volotea tiene en el Aeropuerto de Asturias una base de operaciones y este año operará 2.000 vuelos desde la región, donde tiene una plantilla de 62 personas entre pilotos, tripulantes de cabina y personal auxiliar.

Volotea se suma así al listado de empresas que abandonan Cataluña después del pasado referéndum del 1-O.