Francisco Camps, presidente en 2011 de la Comunidad Valenciana por el PP , presionó al entonces gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, para que la caja de ahorros CAM no fuese intervenida una vez que esta entidad fue expulsada por su mala situación económica de la fusión emprendida por Cajastur, Caja Extremadura y Caja Cantabria. Ordóñez aseguró ayer en el Congreso que no recibió presiones del PSOE ni del PP, salvo la conversación con Camps y que aseguró querer "olvidar". Ordóñez dijo que sí llegó a detectar la burbuja inmobiliaria y de crédito de España en 2003, pero no las dos crisis económicas que se sucedieron: la derivada de la crisis financiera internacional en 2008 y la posterior del euro, que calificó como "dos recesiones de caballo". Ordóñez cree que la crisis se hubiera atajado antes con más recursos públicos.