Más salario y menos horas de trabajo. Ésas serán las dos peticiones que los sindicatos UGT y CC OO pondrán sobre la mesa en la negociación del nuevo convenio colectivo del sector del metal, el más populoso de la región, que tiene en nómina a 23.000 trabajadores y que toca renovar después de que caducara el 31 de diciembre, aunque las centrales auguran dificultades para que los empresarios asuman esas dos propuestas.
En un principio, la negociación del convenio, para el que ya ha habido algún acercamiento informal, comenzará a principios de febrero. Uno de los pilares de la negociación será el de la subida de los salarios en el sector, según destacó el portavoz de la Federación de Industria, Construcción y Agroalimentación (FICA) de UGT, Javier Campa.
Una de las principales reclamaciones de los sindicatos será reducir la jornada en el sector. Ahora, los trabajadores acogidos a este convenio completan 1.736 horas anuales, mientras que los de las auxiliares hacen 1.630 y los de Arcelor 1.650, por lo que las centrales quieren aligerar ese desajuste. "Queremos darle una vuelta ", señaló Campa.
En la misma línea, el secretario de acción sindical de la Federación de Industria de CC OO, Manuel Pérez Uría, destacó que "esperamos que sea una negociación ágil". Es decir, rápida. Los sindicatos entienden que el sector industrial asturiano, y en particular el metal, está en clara recuperación y mejoría. Uría también resaltó que el ajuste de la jornada es una reclamación "histórica" y señaló "hay que ir ajustándola para favorecer la conciliación de los trabajadores".
