El impulso que en los años precedentes había registrado la recaudación de la Agencia Tributaria por las acciones de lucha contra el fraude se ha frenado en los dos últimos ejercicios, en los que tales ingresos se han situado por debajo de los 15.000 millones de euros. Según los datos presentados ayer por el organismo que dirige el asturiano Santiago Menéndez, la recaudación por ese capítulo ascendió en 2017 a 14.792 millones, 91 millones menos que en 2016.

Aún así, Menéndez puso el acento en el hecho de que los resultados del pasado año son los terceros mejores en la historia de la Agencia Tributaria. Los ingresos por la lucha antifraude más que duplican los que se registraban hace una década, y se han registrado avances significativos en el despliegue de actuaciones presenciales y en el manejo de nuevas herramientas de control informático. Algunos de los principales datos conocidos ayer se exponen en los siguientes puntos.

Investigación. Los inspectores y técnicos de la Agencia investigaron a un total de 117.380 contribuyentes, a quienes se reclamaron deudas con Hacienda por valor de 5.378 millones de euros, un 1,3% más que en 2016. El 42% de esa cifra corresponde a acciones realizadas por los equipos que controlan a los grandes contribuyentes (empresas de cierto tamaño y patrimonios cualificados).

Grandes patrimonios. La Agencia Tributaria comenzó a realizar en 2017 las primeras comprobaciones entre grandes patrimonios vinculadas con una nueva herramienta informática que permite un control más sofisticado. Los ingresos por esta vía fueron de 327 millones.

"Peinados" del IVA. Los servicios de inspección dieron "un nuevo y fuerte impulso a sus actuaciones presenciales" destinadas a localizar fraudes con el IVA en sectores de riesgo, particularmente en aquellos negocios orientados al consumo en los que se maneja dinero en metálico. Esas operaciones, conocidas en la jerga de la Agencia como "peinados", consistieron en 32.215 visitas a negocios, el 31% más interanual.

Pagos en efectivo. Se investigaron casi 7.500 denuncias por incumplimientos de la limitación de los pagos en efectivo (prohibición de pagos en metálico superiores a 2.500 euros cuando interviene una empresa o un profesional). Al mismo tiempo se impusieron algo más de un millar de sanciones.

Alquileres. La Agencia Tributaria intensificó el control sobre los ingresos no declarados por alquileres de viviendas, un actuación que generó 522 millones de recaudación.

El sindicato de técnicos de Hacienda (Gestha) criticó que en 2017 cayera la recaudación de la lucha contra el fraude fiscal por tercera vez en los últimos cinco años. Según el colectivo, ese balance demuestra el "fracaso" de la Agencia Tributaria en la materia. Añade que los datos inducen a pensar que la persecución del fraude se centra más en pequeñas empresas, autónomos o asalariados que en grandes compañías y multinacionales.