Orovalle, la filial asturiana de la canadiense Orvana, ha aumentado la producción de oro en sus minas de Belmonte y Salas el 40% en el último trimestre (el segundo de su ejercicio fiscal) respecto a los tres meses precedentes, e incrementó la ley del mineral extraído en el 25%. La producción alcanzó las 15.139 onzas, equivalentes al 61% de la extracción total de la multinacional, cuya producción aurífera total creció el 7%.
Esta mejora productiva supone regresar a tasas de 2017, antes del bache que sufrieron las explotaciones asturianas del grupo entre octubre y diciembre, con una caída del 29%. Con esta recuperación, el grupo comienza a cumplir la mejora que había pronosticado en febrero.
Orvana también se está beneficiando de la recuperación del precio del oro en lo que va de año (pasó de 1.242,9 dólares la onza el 10 de diciembre a 1.337,6 ayer) porque actúa como valor refugio ante el temor a la inflación que puede generar Trump, la guerra comercial y el proteccionismo, las turbulencias financieras de febrero y los riesgos geopolíticos.
La producción de cobre en Asturias también mejoró el 56% y alcanzó en el trimestre los 1,4 millones de libras.
