La reestructuración del sector bancario continúa eliminando sucursales. Según datos del Banco de España, entre 2008 y 2017 cerraron en Asturias el 32% de las oficinas, al pasar de 966 a 661. Sin embargo el Principado es una de las tres comunidades autónomas -junto con Baleares y Murcia- en las que no ha aumentado el número de municipios sin sucursal bancaria.

Un estudio que acaba de publicar el catedrático Joaquín Maudos, director adjunto del Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE), señala que en 2016 había en España 4.114 municipios que no disponían de oficinas bancarias, lo que supone un 15% más que en 2008. Esa "exlusión financiera" afecta a 1.256.590 personas, el 34,2% más que en 2008.

Sin embargo, en Asturias no se produjeron cambios en el periodo estudiado de 2008-2016. Pese a la reestructuración bancaria siguen siendo ocho, de los 78 concejos, los que no tienen oficina e incluso se han reducido un 6,3% los habitantes afectados (un total de 6.416) debido a la caída de la población rural.

Que no haya aumentado el número de municipios de Asturias sin oficina de servicios financieros se debe, en buena medida, al mantenimiento de la red de sucursales de las cooperativas de crédito, la principal de ellas Caja Rural de Asturias. De hecho, según el estudio de Maudos, en 13 concejos asturianos (con una población conjunta de 13.473 habitantes) sólo hay oficinas de cooperativas de crédito. Además en tres (con una población de 3.068 habitantes) sólo hay oficinas de bancos de fundaciones bancarias, es decir, de Liberbank.

Maudos señala que en este contexto "en el que ha sido necesario cerrar oficinas para asegurar la viabilidad del sector bancario y en el que previsiblemente se seguirán cerrando en los próximos años, es importante que tanto las entidades financieras como las administraciones públicas implementen medidas para evitar la exclusión financiera". En el primer caso mediante el avance de la banca online y en el segundo asegurando que internet llegue a todas las poblaciones.