La fábrica de Ence en Navia ha iniciado su parada técnica anual, a la que destinará más de ocho millones de euros. En ella tomarán parte hasta 1.650 trabajadores y 120 empresas con el objetivo de llevar a cabo mejoras en la planta. Asimismo, se aprovechará para instalar puntos de conexión necesarios para el proyecto "Navia 80" que supondrá una ampliación de capacidad de 80.000 toneladas de Ence Navia y que estará operativa en 2019.

Además de empresas asturianas, participan en esta parada compañías especializadas del sector de la celulosa que proceden de países como Brasil, Holanda, Austria, Noruega y Suecia, según ha informado Ence. Dedicará más de 4,2 millones de euros al capítulo ambiental, principalmente para la instalación de un nuevo clarificador de licor verde, que supone mejoras operacionales en el proceso de recuperación de productos químicos y de reducción de emisiones de partículas en los hornos de cal. Otra inversión relacionada con este capítulo es la reducción de ruidos en las líneas del parque de maderas y las torres de refrigeración.

La reducción del impacto oloroso de la fábrica, reducir el impacto acústico de la factoría en su entorno, minimizar emisiones e incorporar mejoras en la calidad de su efluente son objetivos destacados de la parada de la fábrica de Ence. En este sentido la planta dará mayor impulso al Plan de Eliminación de Olores, que permitirá reducir el impacto oloroso significativamente. A pesar de las mejoras logradas en este campo, Ence asegura que mantendrá su esfuerzo inversor hasta la total erradicación de los olores.

Para la mejora de la eficiencia del descortezado y así poder alcanzar niveles de eficiencia óptimos en el aprovechamiento de la madera, se sustituirá un nuevo tambor de descortezado en línea del parque de maderas, lo que supondrá una inversión de 1,3 millones de euros.