La compañía asturiana Alsa pasará a ser el mayor operador privado de transporte de viajeros en Marruecos tras lograr ayer, en alianza con la empresa marroquí CityBus, la adjudicación del servicio de autobuses en las ciudades de Rabat-Salé y Temara. Alsa asumirá el servicio en el plazo de un año.

Con este contrato, el mayor de una empresa española fuera de España en este sector, Alsa opera ya en seis ciudades marroquíes: Rabat, Temara, Agadir, Marraquecht, Khouribga y Tánger. La nueva concesión consta de 61 rutas urbanas, 500 autobuses, 1.600 empleos, 109 millones de viajeros anuales y 1.000 millones de facturación durante los quince años de su vigencia, prorrogable a veintidós.

Alsa, presente en Marruecos desde 1999, y que ya había optado sin éxito al transporte de Rabat en 2007, pasará a contar en el país norteafricano, tras la adjudicación de ayer, con una flota de 1.000 autobuses y 3.600 empleados. Su volumen de facturación en el reino marroquí ascenderá a 100 millones de euros anuales a partir de 2019 y transportará cada año a 270 millones de viajeros.

La compañía asturiana, filial del grupo británico National Express -del que familia asturiana Cosmen Menéndez-Castañedo es accionista de referencia-, acometerá un plan de modernización y renovación del sistema de transporte urbano en la capital marroquí y su área metropolitana, que suman una población de 2,5 millones de habitantes.