La ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, está convencida de que, si finalmente se establece un impuesto a la banca destinado a financiar el sistema público de pensiones, los bancos van a ser "solidarios", "entre otras cosas", dijo, "porque los pensionistas" (diez millones actuales, entre los que están el sistema contributivo más los del asistencial y los de las clases pasivas) "son sus clientes".

La ministra sostuvo que el sistema financiero también debe ser solidario porque el país lo fue "con la banca y con las cajas de ahorros quebradas". Por ambas razones, se mostró "convencida" de que los bancos asumirán el impuesto a la banca para sostener la Seguridad Social y no los repercutirán en los ciudadanos. La ministra señaló, en declaraciones a la cadena Cope, que la ley General de la Seguridad Social ya prevé que se puedan usar impuestos para contribuir a financiar las pensiones, además de la aportación de las propias cotizaciones del sistema, y que el Gobierno trabaja en esa línea para la que buscará el apoyo de otras fuerzas políticas y de los agentes sociales. Magdalena Valerio anunció que antes de que acabe julio convocará la mesa del diálogo social para las pensiones, que no se ha vuelto a reunir desde la primavera de 2017.

El Gobierno, dijo, quiere dejar de costear con cargo a las cotizaciones "cosas que se pueden pagar con los presupuestos del Estado" como las medidas de fomento del empleo (reducciones de cuota o tarifas planas) y los gastos de gestión de la Seguridad Social. Valerio anunció que el Gobierno prepara un plan de lucha contra la explotación laboral, para evitar situaciones de precariedad como el impago de las horas extra y el fraude de los "falsos autónomos".