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Las eléctricas toman posiciones para dejar el carbón tras la condena del Gobierno

Naturgy, que sopesa el cierre de Soto de la Barca, deprecia el valor contable de sus térmicas y vende una explotación en Sudáfrica que las abastecía de mineral

La ministra para la Transición Ecológica, Teresa Rivera, declaró tras tomar posesión del cargo que "el carbón tiene poco futuro". Desde entonces, las compañías energéticas han ido tomando posiciones para prescindir del mineral. La más activa es la antigua Gas Natural Fenosa, que incluso ha teñido de verde su nombre y ahora se denomina Naturgy. Esta compañía, que aún no ha confirmado si prolongará la vida de la central de carbón de Soto de la Barca (Tineo) más allá de 2020, ha depreciado el valor contable de sus térmicas y ha vendido una mina de carbón en Sudáfrica que las abastecía de mineral.

El pasado jueves Naturgy presentó los resultados del primer semestre del año con unas pérdidas de 3.281 millones de euros. Los números rojos se deben a una maniobra contable: la depreciación de activos por valor de 4.279 millones de euros. De esa cantidad, 3.939 millones se corresponden al deterioro de activos de generación en España, en concreto centrales nucleares, ciclos combinados y térmicas de carbón. La revisión del valor de esas centrales es consecuencia del plan estratégico de la compañía 2018-2022, que fue presentado el pasado 27 de junio y que incluye un nuevo modelo de negocio en el que las renovables tienen mayor protagonismo y en el que se actualizan las proyecciones a la luz de las nuevas variables del entorno, en las que tienen peso las decisiones del Gobierno de España. El mismo día que Naturgy presentó su plan estratégico llegó a un preacuerdo para la venta de su 70% de participación en la compañía minera Kangra Coal a Menar Holding. Kangra extrae cada año tres millones de toneladas de carbón en Sudáfrica y es accionista de la terminal de mineral Richard Bay, una de las más grandes del mundo y donde se cargan buques para abastecer de combustible a las térmicas de carbón que Naturgy tiene en Asturias, Galicia y Castilla y León.

Narturgy da pasos para prescindir del carbón, estrategia que Iberdrola inició antes del cambio de Gobierno en España al anunciar el cierre de las centrales de Lada, en Asturias, y Velilla, en Palencia. Esta semana, el presidente de Iberdrola, Ignacio Galán, señaló que la visión del Gobierno de Pedro Sánchez sobre la transición energética está "muy en línea" con el de la compañía e insistió en que para cumplir el objetivo de renovables hay que cerrar las térmicas de carbón.

Viesgo también trató de deshacerse de sus dos centrales de carbón (Puente Nuevo y Los Barios) en la venta de activos a Repsol, pero la petrolífera no quería ni hablar de carbón y adquirió centrales de gas e hidroeléctricas, entre ellas las asturianas del río Navia y de Picos de Europa.

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