Caja Rural de Asturias obtuvo en el primer semestre del año un beneficio neto de 16,59 millones de euros, un 14,5% más interanual. Los créditos concedidos se elevaron un 4,86 % y alcanzaron la cifra de 2.279 millones de euros, mientras que los depósitos de clientes crecieron un 19,63% hasta los 3.840 millones de euros. La entidad siguió reduciendo la morosidad y situó su tasa en el 3,12%. Caja Rural incorporó como nuevos clientes 6.864 particulares, 987 empresas y 920 autónomos y profesionales, informó la dirección.