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Las medidas contra el fraude tributario

Cerco del Principado al fraude fiscal en los cambios de domicilio y en el IBI

Los controles tributarios se vuelcan de nuevo en el impuesto de sucesiones, que recauda un 21% menos tras la última rebaja

Cerco del Principado al fraude fiscal en los cambios de domicilio y en el IBI

Las medidas de prevención y lucha contra el fraude fiscal que está desplegando este año el Ente Público de Servicios Tributarios del Principado vuelven a poner una atención especial sobre el control del pago de los impuestos de sucesiones y patrimonio y sobre uno de los procedimientos utilizados para eludir ambos tributos: los cambios de domicilio a otras comunidades. El programa de trabajo de los servicios de inspección incorpora además como novedad un seguimiento singular de las comprobaciones del impuesto de bienes inmuebles (IBI), para identificar a los dueños de construcciones y solares por los que ahora no se tributa.

El llamado Plan de Control Tributario tiene como propósito este año "intensificar y consolidar" las políticas desarrolladas en ejercicios precedentes, según se expone en una resolución reciente del Fisco asturiano. Los pormenores de algunas actuaciones previstas se exponen en los siguientes puntos.

Beneficios del heredero. Además de verificar las declaraciones (autoliquidaciones) presentadas por los contribuyentes del impuesto de sucesiones, las tareas de inspección pondrán el acento en el cumplimiento de los requisitos para acceder a las deducciones y bonificaciones de que disponen los herederos. El principal de esos beneficios consiste en que los primeros 300.000 euros de la base imponible están exentos de tributar para cónyuges, hijos, nietos y padres, lo que de hecho exime a los contribuyentes que, teniendo ese grado de parentesco, reciben herencias de esa cuantía e incluso superiores (si se añade la deducción por vivienda habitual). Esa rebaja entró en vigor en junio de 2017, ampliando la vigente hasta entonces (200.000 euros). Como el impuesto lo pagan los herederos a los seis meses de la defunción, el impacto de la reforma en la recaudación ha empezado a notarse este año. Los ingresos fiscales del Principado por las herencias (38,6 millones hasta junio) han descendido el 21,45% interanual.

Domicilios ficticios. Los inspectores tributarios harán de nuevo "especial incidencia en los supuestos de cambio ficticio de domicilio". Una de las prácticas utilizadas por los contribuyentes acaudalados para sortear el impuesto de sucesiones (más alto en Asturias que en otras regiones para las herencias superiores a 300.000 euros) y el de patrimonio consiste en cambiar el lugar de residencia a otra comunidad, con frecuencia a Madrid. Allí el tributo de patrimonio no se paga (en Asturias lo hacen quienes superan los 700.000 euros de base imponible) y el de sucesiones es testimonial para los herederos más directos. Para que el cambio de domicilio sea fiscalmente efectivo, el contribuyente debe residir en el lugar al menos la mitad del año (186 días) y haberlo hecho durante los cinco anteriores al fallecimiento en el caso de Sucesiones. Una de las formas de fraude detectadas con alguna frecuencia consiste en que el contribuyente fija su residencia legal fuera de Asturias, pero en realidad continúa haciendo la mayor parte de la vida en la región. El Principado suele exigir a los contribuyentes desplazados que acrediten que pasan la mayor parte del año fuera de Asturias.

Inmuebles y coches. El Ente Público de Servicios Tributarios recauda por encargo de casi todos los ayuntamientos asturianos los principales impuestos municipales. Los controles antifraude también alcanzan a estos tributos. En el caso de la "viñeta", este año se hace de nuevo un seguimiento de los llamados vehículos históricos o los coches con más de 25 años, que suelen tener bonificaciones en este impuesto (75% en Oviedo y 100% en Gijón). Y el Plan de Control Tributario dedica por primera vez un apartado específico al impuesto de bienes inmuebles (IBI) que viene a reforzar los controles que ya se hacían. Los trabajos, en coordinación con el Catastro y con los ayuntamientos, consistirán principalmente en identificar a quiénes pertenecen fincas urbanas (viviendas y otras construcciones o solares) cuya propiedad es ahora dudosa o desconocida y por los que no se tributa ahora. El Principado colabora también con el Catastro en la localización de construcciones no declaradas.

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