Tesla y su presidente, Elon Musk, han sido acusados por dos inversores de fraude de valores por una trama para perjudicar a quienes especulan en corto con las acciones del fabricante de automóviles. Según la denuncia, el anuncio de Musk a través de Twitter de que planeaba sacar Tesla de Bolsa infló artificialmente la acción y dañó a los "bajistas".