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Asturias recibe 1.300 ciberataques diarios, la mayoría para intentar robar datos sensibles

Los incidentes crecen con fuerza y son cada vez más sofisticados, advierten los expertos Gijón recibe el grueso de estas acometidas, 527 al día

La ciberdelincuencia no da tregua y va a más. Asturias recibió en los primeros siete meses del año 1.298 ciberataques diarios que comprometieron la seguridad de algún equipo informático, sistema o red. Son bastantes más de las agresiones perpetradas durante las mismas fechas del año pasado (924), según las cuentas que manejan los técnicos del Instituto Nacional de Ciberseguridad (Incibe). Las armas de estos delincuentes que actúan a través de internet son cada vez más sofisticadas y buscan, casi de forma desesperada, datos sensibles de las incautas víctimas, especialmente números de cuentas bancarias. Pero también les sirven, por ejemplo, los listados de contactos de los correos electrónicos u otro tipo de información sensible que el usuario tenga almacenada en su ordenador, teléfono móvil o tableta y que pueden vender a compañías de marketing. Un negocio muy lucrativo.

La mayoría de estos incidentes son de escasa intensidad, no causan un gran daño, pero los malos disparan en ráfagas y con fuego a discreción. "Los ataques vienen de todas partes", sostiene Francisco Menéndez, de la compañía gijonesa Contein XXI. Ya no son sólo profesionales, además, "cada vez hay más gente que aprende a hacer estos ataques". Con lo que para las compañías que se dedican a intentar frenar a estos ciberdelincuentes es cada vez más complicado contener los envites. El equilibrio es complicado. En las cifras distribuidas por el Incibe están incluidos sólo los ataques que prosperan y logran causar algún daño. Los intentos se cuentan por decenas de miles, dicen los expertos. Una barbaridad.

Dentro de Asturias, el Incibe destaca que Gijón es el municipio que más ciberataques recibe, 527 diarios entre enero y julio, muchísimos más de los que se registraban de media durante el año pasado en la ciudad (350). Le sigue, lógicamente, Oviedo que recibe el 32% de los ciberataques que hubo en el Principado, 415. La clasificación la completan, por este orden, Avilés, Mieres, Langreo, Piedras Blancas, Laviana, Siero, Villayón y Lugones.

Últimamente, señalan los expertos asturianos que se dedican a luchar contra el cibercrimen, los ataques en los teléfonos móviles se han multiplicado de forma brutal. Estos aparatos están constantemente conectados a la red y se han convertido en una importante puerta de entrada para los cacos. Especialmente, cuando el usuario es muy activo bajándose aplicaciones de internet.

Pero, Julio Rilo, de la empresa ovetense de ciberseguridad Inixa, apunta a otro problema incipiente, el del llamado internet de las cosas, en el que objetos cotidianos (como la nevera o incluso la tostadora) están conectados a la red. "Ahora mismo ahí están las mayores amenazas, especialmente para las empresas, porque en la industria esto se está desplegando de forma muy intensa", agrega Rilo. A todo esto, se une que las mafias que se dedican a la ciberdelincuencia están cada vez más sofisticadas, su estructura es cada vez más compleja y aprovechan hasta el más mínimo recoveco de la red para atacar a usuarios imprudentes. "Esto no para de subir y va a continuar creciendo con el paso del tiempo", advierte Francisco Menéndez.

A mayores, parece, sostienen los expertos asturianos, que ha habido cierta relajación por parte de los usuarios y, lo que es más preocupante, por parte de algunas compañías. "Las empresas siguen sin invertir en ciberseguridad y buena parte de las mayores resistencias nos las encontramos entre la alta dirección", resalta Rilo.

El año pasado, los ataques mundiales de virus como el "Wannacry" o el "Petya" hicieron saltar todas las alarmas y los usuarios trataron de poner todos los cortafuegos posibles para no ser infectados, pero parece que la atención se ha relajado durante estos últimos meses. Esas dos infecciones informáticas llegaron a atenazar la actividad de importantes empresas e, incluso, tuvieron bastante efecto en la región.

Pero el bombardeo no cesa, e incluso se ha recrudecido. Asturias figura como una de las comunidades que más ciberataques recibe, según los datos del Incibe. El Principado se incluye, de hecho, en esta lista negra por delante de otras comunidades con mayor población como Baleares, Extremadura y Aragón. El Incibe asegura que el 2,34% de los ciberataques que se reciben de forma diaria en España tienen como objetivo algún aparato electrónico alojado en Asturias.

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