Arcelor-Mittal ha alcanzado un principio de acuerdo con el Gobierno italiano y los sindicatos para cerrar la adquisición del grupo siderúrgico italiano Ilva. El pacto, que deberá ser ratificado por las asambleas de trabajadores, incluye la continuidad de 10.700 empleados -frente a los 10.300 que se preveían al inicio de la negociación- incentivos para la prejubilación y un compromiso de recolocación como muy tarde en 2025 para los excedentes que no encuentren empleo alternativo, con lo que se dan opciones al conjunto de los 13.500 empleados de Ilva.

Arcelor-Mittal ganó en 2017, con el Gobierno italiano del Partido Demócrata, la adjudicación de la planta de Ilva, en Tarento, que llevaba casi cuatro años bajo administración concursal y con severos problemas económicos. Además, los reguladores europeos dieron luz verde a la operación en mayo de 2017 con la condición de que Arcelor-Mittal realizara una serie de desinversiones en Europa que no afectan directamente a las plantas de Asturias. El plan inicial del gigante siderúrgico incluía despidos que generaron protestas por parte de los sindicatos.

Tras el cambio de Gobierno en Italia, el Ejecutivo formado por el antisistema Movimiento Cinco Estrellas y la Liga frenó la venta por considerar que el plan de Arcelor-Mittal no era satisfactorio a nivel de empleo. El vicepresidente Luigi Di Maio mandó incluso que se analizaran las condiciones en las que se había desarrollado el concurso público para ver si se podía anular.

Ayer, las partes llegaron a un acuerdo preliminar que contempla que Arcelor-Mittal respetará una plantilla de 10.700 personas, que serán incorporadas a la empresa desde este año y hasta 2021. Las otras casi 3.000 recibirán ofertas de trabajo por parte de la compañía, algo que ha contentado a los sindicatos, que han celebrado el pacto.

"El elemento fundamental es que no hay despidos", dijo el secretario general de la Unión Italiana de Trabajadores de la Metalurgia, Rocco Palombella. Di Maio mostró su satisfacción y dijo que "el objetivo es impulsar la ciudad de Tarento".

Arcelor-Mittal adelantó que de ratificarse el acuerdo la operación se cerrará el 1 de noviembre. "Cuando tomemos el control de Ilva, nuestra prioridad va a ser asegurar su estabilidad operacional y al mismo tiempo empezaremos a implementar nuestro programa de 2.400 millones de euros en inversiones", destacó el consejero delegado de la división europea de Arcerlor-Mittal, Aditya Mittal.