La oferta pública de adquisición (OPA) de la compañía estatal China Tres Gargantas (CTG) sobre el 100% de la eléctrica portuguesa EDP ha sido aprobada, y sin imposición de condiciones, por el organismo de la competencia de Brasil (CADE), lo que permite augurar que la operación no va a tener grandes problemas en un mercado relevante para la eléctrica lusa, aunque aún está pendiente el pronunciamiento de la Agencia Nacional de Energía Eléctrica (ANEEL).
La opa de CTG (que ya es el mayor accionista de EDP, de la que posee el 26,27%) está pendiente de que la apruebe una veintena de organismos de al menos ocho países. La mayor dificultad está en EE UU, un mercado muy relevante para EDP Renovables, filial de EDP y sobre la que CTG también ha hecho otra opa.
El enfrentamiento comercial entre el presidente de EE UU y China arroja muchas sombras de duda sobre la aceptación de un dominio pleno de EDP por Pekín. La operación tiene que autorizarla en EE UU el Comité Regulador de Energía (FERC) y el Comité de Evaluación de Inversiones Extranjeras (CFIUS). Este último organismo, presidido por el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, ya ha vetado alguna operación china en suelo estadounidense. El embajador de EE UU en Portugal, George Glass, ha advertido al Gobierno de Lisboa y ha dicho de forma pública que EE UU no permitirá que China controle el negocio de EDP Renovables en EE UU, que dirige el asturiano Miguel Ángel Prado y que es el tercer mayor proveedor de energía verde del país, lo que abre la opción a su venta si CTG sigue adelante con las opas.
