Un reciente cambio en la planificación de las redes de transporte de electricidad para el período 2015-2020 facilitará el proyecto de Arcelor Mittal para instalar en Veriña una central eléctrica que utilizará gases de acería como combustible y que supondrá la inversión de 230,5 millones de euros. Para que esa instalación sea viable será necesario ampliar la subestación eléctrica de Carrió (Carreño), actuación que ha sido incorporada a la citada planificación de infraestructuras, según ha decidido el Ministerio de Transición Ecológica.
Ese fue uno de los proyectos de interés para Asturias que el consejero de Empleo e Industria, Isaac Pola, trató ayer con con el secretario de Estado de Medio Ambiente, el asturiano Hugo Morán, dentro de la serie de contactos que el Principado está manteniendo con otras instituciones para exponer la posición asturiana ante el proceso de transición energética. Morán confirmó que en cuestión de días se conocerá el borrador del Plan Nacional de Energía y Clima, documento que será determinante para conocer el horizonte de funcionamiento que el Gobierno plantea para las térmicas de carbón. Según el consejero Pola, el Gobierno central pedirá a las comunidades autónomas que hagan aportaciones a ese documento.
El representante del Gobierno asturiano también instó a Hugo Morán a agilizar - "optimizar", según la expresión utilizada por Isaac Pola- la tramitación de la nueva autorización administrativa para poner en servicio la regasificadora de El Musel. La instalación carece de esa autorización desde que fue anulada por los tribunales cuando la planta ya estaba terminada.
