Las grandes compañías eléctricas han protagonizado en los dos últimos días un fuerte descenso de sus cotizaciones bursátiles que está relacionado con una de las cuestiones de política energética que el PSOE y Unidos Podemos han incluido en el acuerdo presupuestario anunciado el jueves: acabar con la "sobrerretribución" que, según ambas formaciones, tienen en el mercado de la luz "determinadas tecnologías", en referencia a las centrales nucleares e hidroeléctricas. El acuerdo plantea fijar un límite en los ingresos por kilovatio que estarían obteniendo esas plantas, instaladas antes de la liberalización del negocio de la generación (1997) y, en opinión de las formaciones de izquierda, "sobradamente" amortizadas.

En un contexto general de pérdidas en la Bolsa, ese anuncio ha penalizado a las tres principales compañías eléctricas que cotizan en el Ibex: Endesa acumuló en dos días una caída del 8,29%; Iberdrola, del 5,66%, y Naturgy, del 5,93%. Las dos primeras son las que tienen más capacidad nuclear e hidroeléctrica. En conjunto, la capitalización bursátil de las tres empresas descendió en 5.315,8 millones en dos días.

El acuerdo entre el Gobierno del PSOE y Unidos Podemos incluye un capítulo dedicado a la transición energética que va más allá de las cuentas de 2019. No hay referencias explíticas a las térmicas y al carbón, aunque se habla genéricamente de "revisar" los denominados "pagos por capacidad", cantidades que reciben las centrales carboneras y las de gas por estar disponibles. La ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ya había anticipado en el Congreso su intención de recortar tales pagos.