Los 23.000 trabajadores del metal asturiano están llamados a secundar 12 días de huelga, ante el bloqueo en la negociación de su convenio colectivo. La principal discrepancia es que los empresarios quieren eliminar de un plumazo la antigüedad de todos los empleados que tienen en nómina las empresas del sector. Un complemento que, los sindicatos consideran "innegociable".

Las negociaciones están "completamente rotas por la postura indecente" de la patronal, Femetal, según señaló el secretario general de la Federación de Industria, Construcciones y Afines (FICA) de UGT, Jenaro Martínez. Mientras que el líder de la Federación de Industria de CC OO, Damián Manzano, cargó duramente contra la actitud "agresiva" de los empresarios durante la negociación.

Las jornadas de huelga convocadas por los sindicatos se distribuirán de la siguiente forma: Habrá paros los días 13,14, 20, 21, 27 y 28 de noviembre. Y los días 11, 12, 13, 18, 19 y 20 de diciembre. Los trabajadores del sector ya habían llevado a cabo dos movilizaciones en septiembre contra el bloqueo de la negociación de su convenio.

Además del concepto de antigüedad, que rebajaría considerablemente el salario medio del sector, los sindicatos y los empresarios tampoco se ponen de acuerdo sobre cómo deben de subir los sueldos en el sector. Los empresarios ofrecen un alza del 1,5%, mientras que los sindicatos reclaman un incremento del 3% en línea con el acuerdo de negociación colectiva (ANC) firmado hace unas semanas en Madrid.

"Tampoco", criticó Jenaro Martínez, "quieren reconocer la cláusula de revisión salarial que garantizara un incremento del poder adquisitivo de los trabajadores".

Damián Manzano defendió con firmeza que las previsiones que maneja el sector son "muy buenas". Tanto que la cartera de pedidos de estas compañías ha subido con fuerza en un 26% durante la primera mitad del año.

A mayores, el sindicalista señaló que los resultados de las empresas del sector son de las mejores de los últimos años. "El beneficio neto de TSK subió un 14% en el último año, el de Daniel Alonso un 30% y el de Asturfeito (la compañía del líder de la patronal asturiana, Fade) un 21,6%", desgranó.

"Ante estos números es necesario que salgamos a la calle para reclamar un convenio digno y justo, no podemos permitirnos que no haya un reparto de esos beneficios", señaló Manzano.