El presidente del PP nacional, Pablo Casado, reivindicó ayer que el Gobierno central cuente "con la opinión de los presidentes autonómicos" ante los cierres de plantas que Alcoa pretende llevar a cabo en Avilés (Asturias) y La Coruña.

"Voy a sentarme con Alberto Núñez Feijóo y con Mercedes Fernández para que entre todos consigamos garantizar el empleo de todas las personas que trabajan en las plantas", afirmó Casado en el hall del hotel Reconquista. "La política energética se tiene que hacer de forma responsable", reclamó el líder del PP.