El secretario general de la Federación Socialista Asturiana (FSA-PSOE), Adrián Barbón, calificó de "desafortunadas" las declaraciones realizadas anteayer por la ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, descartando una eventual nacionalización de las fábricas que la multinacional Alcoa prevé cerrar len Avilés y La Coruña. "No somos un régimen comunista", argumentó Valerio. Barbon se distanció de estas palabras y dijo que posiblemente la ministra no quiso decir eso. El líder de los socialistas asturianos opinó en todo caso que la primera opción sigue siendo la presión sobre la multinacional para que, si persevera en el cierra, forzarla a " la venta de las plantas para garantizar el empleo existente".

El consejero de Empleo del Principado, Isaac Pola, no descartó ninguna opción, incluida la estatalización: "Aunque no depende de nosotros", dijo, lo que se pretende es que la empresa acceda a al diálogo (lo que no ocurrió aún, señaló) y "una vez que se tome el diálogo, no se descarta ninguna de las opciones para llegar al objetivo final: mantener la actividad industrial y el empleo". La alcaldesa de Avilés, la socialista Mariví Monteserín, fue más explícita: "Hay que explorar todas las posibilidades que, dentro de nuestro marco jurídico, se puedan aplicar, incluida una posible intervención en caso de una negativa radical de Alcoa a que continúe la actividad".

Enrique López (Podemos) abogó sin dudas por la "intervención del Estado". "No ha habido problemas para rescatar a los bancos y a las autopistas de peaje", argumentó. Gaspar Llamazares (IU) lamentó que la ministra de Trabajo "confunda un régimen comunista con la Constitución de 1978 y su artículo 128, que considera las posibilidades de intervención cuando se trate de la estrategia industrial o de un sector económico", como es el caso, indicó. Según el portavoz de IU, "lo peor de la reflexión de Valerio es que renuncia a un instrumento cuando todavía la multinacional no ha renunciado a la totalidad, que es el cierre".

El secretario general de CC OO de Asturias, José Manuel Zapico, opinó que "no es el momento de descartar ningún escenario". "La nacionalización es posible según la Constitución", dijo.