El último Pleno del Congreso de los Diputados, celebrado ayer, constituyó una muestra de apoyo unánime y sin fisuras contra el cierre de las plantas de Alcoa en Avilés y La Coruña y un espaldarazo a las plantillas con la lectura de una declaración institucional en la que los diputados se comprometieron a "hacer un frente común para seguir defendiendo los derechos de los trabajadores y trabajadoras de Alcoa y el futuro de esta industria en Galicia y Asturias".

La secretaria del Congreso, Alicia Sánchez Camacho, procedió a la lectura de la declaración institucional justo antes de comenzar las votaciones: "Lamentamos y rechazamos la decisión unilateral de la empresa de cerrar tanto la instalación de A Coruña como la de Avilés-Gozón y le demandamos a Alcoa la búsqueda de alternativas para las dos factorías, que son una pieza clave del tejido productivo en Galicia y Asturias".

La Cámara se comprometió a impulsar a todas las administraciones para "instar a la compañía a retirar el expediente de extinción de empleo y abrir una mesa de negociación con todas las partes implicadas para encontrar una solución urgente que garantice el mantenimiento de la actividad empresarial y el empleo". También a trabajar de la mano por un marco energético y estable, como se viene demandando desde hace años, para "proporcionar seguridad y permitir al conjunto de las empresas electrointensivas competir en igualdad de condiciones con el resto de factorías a nivel internacional".