El debate energético sube de temperatura. El presidente de la Federación Asturiana de Empresarios (FADE), Belarmino Feito, acusó ayer al Gobierno de Pedro Sánchez de "inducir" el cierre de las centrales térmicas de carbón con su política en la materia, que tachó de "irresponsable". Por su parte el presidente del Principado, Javier Fernández, alertó de que el cierre conjunto de las centrales de carbón y nucleares tendrá un efecto en los precios energéticos "inasumible".

El secretario de Estado de Energía, José Domínguez, aseguró el jueves que las centrales de carbón cerrarán "de una manera natural bastante antes de 2030" y precisó que sólo 5 de las 14 que hay en España superarán 2020 al no haber invertido en las mejoras ambientales que exige la UE. "Las declaraciones del secretario de Energía sobre el cierre natural de las térmicas son un insulto a la inteligencia. De producirse ese cierre anticipado de las térmicas y de forma generalizada no tendría nada de natural, sería un cierre inducido por una conducta política irresponsable", afirmó Belarmino Feito, que añadió que "cada declaración del señor Domínguez es un mayor despropósito". Feito pidió a la ministra Teresa Ribera "rigor y prudencia en su departamento, en un tema tan sensible para el sector industrial en su conjunto, y le insistimos en que nuestra industria no resistiría, ni merece, una reconversión traumática como la que produciría una descarbonización exprés".

El presidente del Principado, Javier Fernández, también señaló ayer en la Junta General del Principado que a la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, "hay que pedirle prudencia" y "exigirle tiempo" para afrontar el proceso de transición energética. "Todos estamos comprometidos con salvar el planeta, pero queremos que también se salven otras cosas y solo se puede hacer si además tenemos tiempo", señaló el presidente asturiano en referencia a la incidencia que tendrá en la industria las planes del Ministerio para la Transición Ecológica, que incluye el cierre de todas las centrales de carbón y nucleares años antes de 2030.

Esos cierres de centrales tendrán una incidencia en los precios energéticos "totalmente inasumibles", según Fernández, que destacó el peso de la industria electrointensiva en la economía de Asturias.

En respuesta a una pregunta de Gaspar Llamazares (IU), el presidente del Principado incidió en que su posición sigue siendo la misma y favorable a que el "tránsito hacia una economía diferente no se haga en un tiempo que no esté acorde con las necesidades de Asturias y de la industria en su conjunto".

Fernández señaló también que los ciudadanos deben saber que a las industrias electrointensivas se les dan 400 millones de euros para reducir el precio de la electricidad, pero que también hay que explicar que las energías renovables reciben 7.000 millones en primas.