El salario medio de los asturianos apenas ha subido en términos nominales durante la última década e incluso ha bajado significativamente (-12%) si se descuenta el impacto de la inflación acumulada desde 2008 sobre el poder adquisitivo. Al mismo tiempo, la pensión media ha crecido vigorosamente, impulsada por la jubilación de un número creciente de trabajadores que en activo tuvieron sueldos e historiales de cotización más elevados que las generaciones precedentes. La combinación de ambas situaciones, añadida a la disminución registrada en el número de asalariados y al aumento en el de pensionistas, explica que el agujero crónico que el sistema público tiene en Asturias haya alcanzado niveles récord.
Las cuentas cerradas más recientes de la Seguridad Social en la región son estas: el gasto en pensiones contributivas ascendió a 4.433 millones de euros en 2017 y el ingreso en cotizaciones sociales fue de 2.077 millones, de forma que los ingresos generados dieron para cubrir apenas el 47% de la nómina de los pensionistas asturianos. Una década atrás, cuando el mundo se adentraba en la Gran Recesión, las cotizaciones alcanzaban para pagar el 63% del gasto. Entonces, como ahora, el resto lo aportaba la "caja única" de la Seguridad Social. El deterioro se explica por razones demográficas y económicas, entre ellas el comportamiento de los salarios y las pensiones medias que se expone en los siguientes puntos con datos recién publicados por la Agencia Tributaria.
Salarios. El sueldo medio bruto de los asturianos fue en 2017 de 22.421 euros al año, tras una subida modestísima (0,46%) que abona la tesis según la cual el crecimiento de la riqueza reflejado en el producto interior bruto (PIB) no se está trasladando a los salarios (aunque sí a la creación de empleo, con 10.000 asalariados más en 2017 en Asturias). Desde 2008, la remuneración medio ha subido el 2,29% en términos nominales y retrocedido el 11,7% en términos reales si se considera la inflación. El declive salarial arrancó a partir 2012, cuando las tasas de paro alcanzaron niveles históricos y también cuando comenzó a desplegar sus efectos la reforma laboral del PP, componente principal del mecanismo de devaluación interna (rebaja de salarios y precios) que el Gobierno diseñó para recuperar el PIB.
Pensiones. La pensión media fue en 2017 de 17.585 euros brutos anuales, según los registros de la Agencia Tributaria. Subió el 2,35% en relación a 2016, incremento que se explica, no por la revalorización general de las prestaciones, que no pasó del 0,25%, sino por el impacto del técnicamente llamado "efecto sustitución": las pensiones de los nuevos jubilados que entran en el sistema son mucho más altas que las de aquellos que salen de él al fallecer. En una década, la prestación media ha aumentado en términos nominales el 21,6% en Asturias, tasa que multiplica por diez la observada en el salario medio.
