El Gobierno ha decidido compensar las pensiones en 2018 con la inflación de noviembre, con lo que tendrá que abonar a los pensionistas la décima de diferencia entre la revalorización de las pensiones presupuestada (1,6 %) y la tasa anual de IPC del mes pasado (1,7 %). Fuentes gubernamentales han explicado que se ha optado por tomar noviembre y no diciembre como referencia porque es posible que la inflación no supere el 1,6 % en diciembre, con lo que los pensionistas se quedarían sin compensación.