Capsa, la filial fabril de Central Lechera Asturiana (Clas), volverá este año a cifras récord de beneficio neto (por encima de 20 millones de euros, casi un tercio más que en 2017), un resultado bruto (antes de impuestos) superior a 30 millones y una facturación entre 720 y 720 millones (en torno al 5% superior a un año antes), según el avance difundido ayer por la sociedad. En términos nominales (sin contar el efecto de la inflación), habría que remontarse al trienio 2002-2004 para ver resultados netos superiores a los 20 millones y al quinquenio 2007-2011 para encontrar volúmenes de venta por encima de los 700 millones.

El retorno a tales cifras se produce en un contexto más difícil que entonces como consecuencia de la caída del consumo lácteo por habitante en España. En los últimos cinco años la venta de leche se redujo en el país en 300 millones de litros mientras que en ese plazo Capsa la aumentó en 100 millones.

El avance se ha producido mediante ganancias de cuota de mercado. Este año Capsa incrementó su cuota en valor (cifra de negocio) en el 5% en leche (controla el 16% del mercado), el 11% en nata (hasta el 18,5%) y el 25% en nata (hasta el 25,9% del total). Desde 2013 los aumentos de participación en el total del mercado español fueron de 60 puntos porcentuales en leche, 38 en mantequilla y 4,5 en nata. En yogures, donde su peso es minoritario, experimentó un aumento del 30% desde que introdujo las variedades asturianas de arroz con leche, sidra y casadiella. En leche ecológica, su marca Asana (un producto importado de los Alpes austriacos) se ha encaramado a la segunda posición en ventas desde su lanzamiento el pasado mes de enero.

Ingredientes y exportación. La división de negocio de ingredientes para la industria alimentaria (Innova) alcanzó una facturación de 100 millones (un hito en su historia) y el grupo negocia nuevos desarrollos (caso de formulaciones para atender las carencias nutricionales específicas de algunos países de Hispanoamérica y África) y la incorporación de un gran cliente multinacional que catapultaría su cifra de negocio.

La exportación (una actividad que emprendió en 2013) creció el 50% este año, lo que supone pasar a 77 millones de ventas, más del 10% de la facturación total. El propósito es crecer otro 50% en 2019, apostando más por el valor que por el volumen.

La compañía pretende seguir relanzando su negocio quesero, en el que posición ha sido históricamente baja. Junto con la operación "El maestro quesero" (comercialización de variedades artesanales asturianas), que acaba de lanzar, en 2019 pretende invertir recursos para el crecimiento, bien orgánico o mediante compras de empresas y queserías.

Fármacos y fondo semilla. La compañía mantiene su propósito diversificador. En 2019 entrará en el sector farmacéutico mediante una alianza con Cantabria Labs para producir y comercializar en farmacias tres productos nutricionales para enfermos de oncología y otras dolencias. Se trata de fármacos con base láctea y reconocidos por la Seguridad Social. La entrada en el sector farmacológico fue avanzada el pasado verano por el director general de Capsa, José Armando Tellado como proyecto. Tellado así como el presidente de Clas y Capsa, Bertino Velasco, y el director general de Clas, Francisco Sanmartín, aseguraron que el grupo tiene recorrido para crecer más en sus negocios tradicionales y en otros nuevos y que prevé destinar a inversiones 20 millones anuales. Capsa prevé crear un fondo de capital-semilla para fomentar nuevas actividades en otros sectores, adentrarse en biotecnología y abrirse a nuevos canales de venta.