El coche eléctrico circula muy lento en Asturias, por mucho que el Gobierno de España le quiso dar un empujón a final de año con el anuncio de que la futura ley de cambio climático impedirá en 2040 la venta de cualquier vehículo de combustión. Los datos sobre las matriculaciones de coches eléctricos en España en 2018 describen un grado de interés por el transporte alternativo muy simbólico aún en Asturias. Se ha crecido respecto a la venta de estos coches de 2017, pero mucho menos que otras regiones. En datos globales, 2018 se cerró con 113 vehículos eléctricos matriculados, treinta más que hace un año: un 36% más. Pero con ese dato Asturias sólo supera a Ceuta y Melilla, Cantabria y La Rioja, donde las matriculaciones fueron incluso menos.

El mayor crecimiento del coche eléctrico este año se ha dado en Extremadura, con 242 matriculaciones, lo que multiplica por 400 sus datos respecto a los doce meses anteriores; en Galicia, que duplicó sus matriculaciones; así como Murcia, Madrid o Aragón, con crecimientos de más del 80 por ciento. En datos brutos, Madrid tiene un total de 7.727 coches eléctricos matriculados este año, frente a los algo más de cuatro mil que salieron a circulación el pasado año. Llama la atención que sólo en el mes de diciembre se matricularon en la capital de España 1.780 coches, coincidiendo con la entrada en vigor de la drástica reducción del tráfico en el “cogollo” madrileño en un proyecto que se conoce como Madrid Central. Por lo que respecta a Cataluña tiene un nivel de implantación del vehículo eléctrico mucho menor: este año recién concluido fueron 2.146 las matriculaciones realizadas, por las algo menos de dos mil del año pasado. En Valencia son poco más de 600 los coches de este tipo que se matricularon en los últimos doce meses y en el resto de comunidades hay muchos crecimientos de más del 40%. De hecho, la media en España es del 61% más de ventas en 2018.

Por lo que respecta a los coches híbridos, en total se entregaron el pasado año 76.112 vehículos en toda España. En Asturias las matriculaciones totales en el año fueron 910, un 26% más que en 2017. También supone una cifra de crecimiento menos que la media española, que fue del 36%.