El presidente de la Comisión Europea (CE), Jean-Claude Juncker, abogó por un seguro de desempleo en la Unión Europea (UE) como instrumento para amortiguar crisis económicas repentinas, aunque puso como condición la realización previa de reformas nacionales. "No puede ser que un país de la UE se vea obligado a recortar el subsidio de desempleo debido al aumento de las cifras del paro en caso de una crisis de la que no tiene culpa", señaló Juncker en declaraciones al dominical aleman "Welt am Sonntag".

Más importante, subrayó, "es que en situaciones de crisis no se ahorre donde no toca; es decir, en inversiones, educación y subsidios de desempleo". Así, Juncker abogó por un apoyo desde Europa a los sistemas de seguro de desempleo nacionales en caso de una crisis económica, aunque con restricciones, puntualizó.

"Aunque estoy a favor de un seguro de desempleo, no debe convertirse en carta blanca para los países que no llevan a cabo reformas y en consecuencia sufren dificultades", dijo. Para financiar este seguro de desempleo europeo, el político luxemburgués señaló que la Comunidad Europea ha previsto en su borrador para un presupuesto a medio plazo dos instrumentos. El primero consiste en 25.000 millones para financiar programas de ayudas estructurales y el segundo, en 30.000 millones para un mecanismo de amortiguación contra impactos asimétricos y externos, que podría incluir también el reaseguro.