El exconsejero de Economía Jaime Rabanal defendió ayer tanto el funcionamiento de los mecanismos de control de los sistemas de formación para el empleo puestos en marcha en el Principado como el resultado de los mismos. Rabanal se expresó así durante su comparecencia ante la comisión sobre el uso de fondos en cursos de formación donde ha advertido de que su presencia tenía "poco que ver" con el objeto de la investigación dado que su labor como consejero se limitaba a establecer los sistemas de control, pero no a su gestión.

"Mi responsabilidad era de dotar a esos instrumentos de mecanismos de control y creo que lo hicimos razonablemente bien", ha apuntado el exconsejero tras defender también el funcionamiento del modelo diseñado para impulsar las políticas activas de empleo.

Así, ha señalado que, en los años previos a la crisis, Asturias logró niveles de inserción de hasta el 50 por ciento entre los asistentes a los cursos, por encima del de otras comunidades.

No obstante, ha admitido que probablemente el modelo se fue "encorsetando" a la hora de responder a las necesidades del mercado de trabajo al tener "cierta lentitud" para satisfacer la demanda real de empleo lo que hubiera requerido de cursos más largos y más específicos.

El parlamento asturiano constituyó esta comisión tras la investigación judicial sobre UGT abierta tras una denuncia de la Fiscalía en 2015 que llevó a la detención del ex secretario general del sindicato en Asturias, Justo Rodríguez Braga, y de cinco trabajadores más de la central después de un registro para requisar documentación sobre el caso.

Un informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil cifró en 1,35 millones de euros el presunto fraude que pudo haber cometido a lo largo de cinco años UGT-Asturias al destinar parte de las subvenciones destinadas a cursos de formación a otros fines, como el pago de nóminas.

El documento mantiene que el presunto fraude asociado a los cursos de formación procede en casi 850.000 euros de la propia UGT-Asturias, mientras otros 504.000 euros estarían vinculados a su fundación IFES, lo que en total supone unos 43.000 euros más de los que se habían calculado inicialmente.