La constructora asturiana Coprosa, una de las mayores del sector asturiano, llegó ayer a un acuerdo con sus principales acreedores (los bancos Santander y Sabadell, que suman una amplia mayoría) para salir del concurso voluntario que solicitó el 20 de febrero del año pasado y fue admitido el 13 de marzo. La empresa entregó la documentación de la propuesta de convenio en el juzgado mercantil número 1 de Oviedo para solicitar el levantamiento de la medida.

La empresa, que se ha mantenido al día en el pago a los trabajadores y a los acreedores, y en sus obligaciones con la Hacienda Pública y la Seguridad Social, había anunciado cuando solicitó el concurso voluntario que la decisión obedecía a lo que definió como "tensiones temporales de liquidez". Ya entonces avanzó que propondría un convenio con los acreedores para superar las dificultades y proseguir "con el desarrollo de su negocio". La compañía, que tenía en aquel momento 136 empleados, ajustó desde entonces sus estructuras y hoy mantiene en plantilla a un centenar de trabajadores.

Los problemas de liquidez de la constructora obedecieron fundamentalmente, según dijo entonces la empresa, a impagos por obras ejecutadas en Catar, país en el que empezó a operar en 2012, y, en menor medida, a algunos problemas en Egipto, donde también está presente la empresa desde 2016 con una filial compartida con capital autóctono. Los cobros pendientes están tramitándose en los tribunales tras las reclamaciones presentadas por la compañía asturiana, cuya crisis también se atribuyó a las vicisitudes de la promoción ovetense Monte Nuño. El grupo tiene asimismo actividad en Polonia desde 2013 en el negocio de la edificación y la obra pública.

Construcciones y Promociones Coprosa, fundada en 1976 y que preside Sabino Iglesias, ha seguido ejecutando obras y proyectos en Asturias, Galicia, Madrid y País Vasco, entre otros territorios. Centrada en origen en la realización de obra ferroviaria y edificación, el grupo fue diversificando sus actividades a todo tipo de trabajos (obra civil, equipamientos especiales y otros) y amplió su mercado: primero, en el ámbito nacional y luego, en el extranjero. En Pozaldez (Valladolid) tiene un centro logístico de mantenimiento ferroviario.