Tres empresas del sector de vehículos de alquiler con conductor (VTC) -Vector Ronda, Moove Car y Auro- han anunciado el despido de más de 2.000 personas en Cataluña tras la entrada en vigor de la nueva regulación, y han acusado a la Generalitat de ofrecerles trabajar "irregularmente".

"Asistimos a uno de los mayores ERE (expedientes de regulación de empleo) de la historia de Cataluña", dijo el presidente de la patronal Unauto, Eduardo Martín, que estima que con la entrada en vigor del decreto de la Generalitat habrá 3.500 parados más de empresas de VTC, que "son rentables", con la única finalidad de "beneficiar al taxi".

Las empresas advierten también que Cataluña verá mermada sus arcas públicas en alrededor de 120 millones de euros al año y unos 310 de aportación al producto interior bruto (PIB) de la región y tendrá que hacer frente a reclamaciones por más de 1.000 millones de euros por parte de los titulares de autorizaciones VTC.

La patronal catalana de VTC ha denunciado además que Isidre Gavín, secretario general de Infraestructuras y Movilidad del Departamento de Territorio, les ofreció, en nombre del conseller, Damià Calvet, trabajar "irregularmente" para poder seguir operando en Barcelona.

Los taxistas de Madrid trasladarán las protestas de su decimotercera jornada de huelga a la manifestación de los pensionistas que recorrerá este sábado el centro de la capital para reclamar unas pensiones dignas.