El magnate ruso Mikhail Fridman, mayor accionista del grupo de distribución Dia -del que posee el 29% a través de la sociedad Letterone Investment Holding-, ha anunciado el lanzamiento de una oferta pública de adquisición (OPA) sobre el 71% del capital que aún no controla en la compañía, con el propósito de hacerse con el dominio del 100% y excluirla de Bolsa. El inversor ruso se conformaría no obstante con la consecución de al menos el 64,5% de la empresa y la operación se supedita a la aplicación de lo que Letterone ha denominado un "rescate integral para Dia" mediante una ampliación de capital de 500 millones que estaría condicionada no a una quita de deuda (1.422 millones en términos netos) por la banca acredora pero sí a una renegociación de sus vencimientos.

Dia, tercer grupo de distribución alimentaria en España, y con implantación en España, Portugal, Argentina y Brasil, tiene una notable presencia en Asturias, acrecentada tras la adquisición en 2014 de la antigua cadena de supermercados de origen asturiano El Árbol, reconvertida en la actual enseña La Plaza de Día. A través de siete marcas y formatos de establecimientos diferentes, Dia cuenta en Asturias con 1.260 empleos y 133 tiendas (109 propias y 24 franquiciadas), sobre un total de 5.500 entre España y Portugal, y compra anualmente a proveedores de la región por un valor superior a los 94 millones.

El movimiento de Letterone era esperado por el mercado desde diciembre, cuando el grupo del magnate ruso renunció a todos sus puestos en el consejo de Dia, incluida la presidencia, en discrepancia con la gestión y por desacuerdo con los términos acordados por los gestores y el consejo con la banca acreedora para reconducir la grave situación financiera por la que atraviesa el grupo a causa de su elevada deuda, la caída de sus ingresos y beneficios, y los sucesivos cambios en la cúpula, que desde julio ha tenido tres consejeros delegados.

A juicio de Letterone, Dia "se encuentra de forma demostrable en serias dificultades financieras y requiere la implementación de un plan de transformación integral". Mikhail Fridman cuenta en su equipo con gestores experimentados en el sector de la distribución detallista internacional, como Stephan Ducharme, que presidió la cadena de distribución rusa X5 Retail Group, líder en su país y octava en el mundo, y Karl-Heinz Holland, que fue consejero delegado del grupo alemán de supermercados Lidl.

La oferta de compra de Letterone, dirigida a todos los accionistas, cuenta, según diversas informaciones, con el respaldo financiero de Goldman Sachs, que es a su vez el segundo mayor accionista de Dia, del que controla el 5,18%.

La operación supone un quiebro respecto a la estrategia que estaba siguiendo Dia, cuyos gestores, comandados desde diciembre por Borja de la Cierva (ex ejecutivo de Inditex y de El Corte Inglés), habían llegado a un acuerdo de refinanciación con la banca acreedora por un importe de 895 millones, supeditada a que la empresa fuese capaz de colocar una ampliación de capital por un monto de 600 millones, que ya estaba asegurada por Morgan Stanley. El plan preveía la venta de su cadena de centros mayoristas (los "cash & carry" Max Descuento), con cinco implantaciones en Asturias, y su red de perfumerías Clarel, con ocho tiendas en la región.

La opa se formula a 0,67 euros por acción (valora Dia en 417 millones), lo que entraña una prima del 56,1% respecto a los 0,42 euros del lunes, del 52,5% sobre el precio medio ponderado por volumen en el último mes (0,44 euros) y del 19,4% sobre el promedio de los últimos tres meses, pero los minoritarios han expresado su malestar, dado que supone una merma de valor del 83% respecto a hace un año. Ayer la acción se disparó el 63,1% y cerró por encima de 0,70 euros, tres euros más que el precio ofertado por Fridman. Dia valía hace un año 2.496 millones y ayer cotizaba a 435,8 millones. Por el medio hubo una reformulación de las cuentas de 2017 (el beneficio se recortó el 20%), una revisión de 2018 (sobre cuyo resultado se mantiene la incógnita) por menores ventas y costes al alza, y la eliminación del dividendo de 2019.