Tiago Lemos, un empresario portugués asentado desde hace años en Gijón, tuvo que sudar la camiseta para conseguir que tres grandes inversores entraran en su compañía para darle el impulso que necesitaba.
La empresa en cuestión es Hoope Running Apparel y se dedica a hacer llamativas camisetas para corredores, algunas con diseños de lo más atrevidos. Con ellas, Lemos pateó muchas ferias y con la ayuda del Centro Europeo de Empresas e Innovación (CEEI) logró hace unas semanas captar a tres "ángeles inversores" para conseguir que su negocio echara a correr de forma definitiva. Uno de ellos es, además, el director general de Google en Portugal, Bernardo Correia, que ha invertido en la compañía asturiana a título individual y que está echando una mano para que la parte digital de la empresa tire para arriba. No es para menos, ya que el 80% de las ventas llega a través de internet.
Los otros dos son el portugués Daniel Coelho y la asturiana Victoria del Tejo. "El negocio está creciendo con mucha fuerza, ahora estoy vendiendo diez veces más que hace sólo un par de años y ésa es una de las cuestiones fundamentales que han visto estos inversores para apostar por la compañía", afirma Lemos. Tanto es así que llegó a rechazar una oferta de un fondo de capital riesgo. "No era el momento", dice. Ahora busca nuevos retos y la compañía pretende entrar en el mundo de los maillots para ciclistas.
