La junta general de accionistas de Caixa Bank aprobó por mayoría la reelección del consejero delegado, Gonzalo Gortázar, y varios vocales del consejo, así como la gestión y resultados de 2018. Hubo dos incorporaciones al consejo, entre ellas la de la exministra Cristina Garmendia.

Jordi Gual, presidente de la entidad, consideró esperanzador que el Banco Central Europeo (BCE) se replantee el tipo de interés negativo que aplica a los bancos, juzgó como una "oportunidad" la transformación digital, defendió un modelo de banca "socialmente responsable" y destacó "el buen comportamiento de la acción, con un retorno total (incluidos dividendos) el 13% superior al de los bancos del Ibex". Ayer la junta aprobó un dividendo complementario de 10 céntimos.

El consejero delegado, Gonzalo Gortázar, reafirmó el objetivo de una rentabilidad sobre recursos propios del 12% a fines del plan 2019-2021, frente al 3,4% de 2014, y la continuidad del plan de implantación del nuevo modelo de oficina urbana (se pretenden 600 sucursales de este tipo en 2021) y la apuesta por Agro Bank en el medio rural.