La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El precio del gas, nueva amenaza para Arcelor y la gran industria asturiana

El combustible en España es un 20% más caro que en Europa, se quejan las patronales

El precio del gas, nueva amenaza para Arcelor y la gran industria asturiana

La industria asturiana está lastrada por el precio de la electricidad a la hora competir con otras plantas europeas, pero además ahora tiene que hacer frente a otro escollo: la factura del gas. Las patronales de sectores con fuerte implantación en Asturias como las de la siderurgia, la industria química, la industria papelera o la del vidrio se han unido para denunciar la "grave situación de desventaja competitiva" que genera el diferencial de precios con los principales países de Europa. Destacan que en España el gas llega a ser entre un 20 y un 25% más caro.

El presidente de la Federación Asturiana de Empresarios (FADE), Belarmino Feito, destacó, ante el recorte de producción de 700.000 toneladas anuales que ya está aplicando Arcelor-Mittal en sus fábricas de Asturias, que habría que reflexionar "por qué Arcelor toma la decisión de ajustar producción en Asturias y no lo hace en Francia o Alemania". En esos países impactan de igual forma el incremento del precio de las materias primas (el mineral de hierro, el carbón de coque y la chatarra), el aumento de los costes de las emisiones de CO2 y la competencia de las importaciones de acero procedente de países extracomunitarios, "una tormenta perfecta" a juicio Axel Eggert, director general de la patronal siderúrgica europea Eurofer. La principal diferencia de España, según destacaron fuentes de Arcelor-Mittal, está en el precio de la electricidad

"La diferencia de los precios del gas que soportan las plantas de Asturias con respecto a otras europeas no es tan alto como en el caso de la electricidad, pero también es importante", señalaron fuentes de Arcelor-Mittal, que destacaron que la compañía ha puesto en marcha medidas para rebajar la factura de gas natural -como el aprovechamiento de los gases residuales de los altos hornos y de las baterías de coque para alimentar procesos productivos- pero el consumo "sigue siendo muy alto, con lo que el precio afecta a la competitividad".

Arcelor-Mittal demanda que los precios en España se igualen a los de Europa y ha encauzado su reclamación a través de la asociación siderúrgica Unesid, que se ha unido a otras nueve patronales españolas para hacer frente a los precios del gas. Entre esas asociaciones empresariales están las de la industria química (Feique), papelera (Aspapel), del vidrio (Confevicex) o la que agrupa a las empresas que utilizan la cogeneración de calor y electricidad en sus procesos (Acogen) y a ellas pertenecen compañías asturianas o con fuerte implantación en la región como Química del Nalón, Fertiberia, Bayer, Du Pont, Maxam, Ence, Starglass, Capsa, Hunosa, ILAS, Lácteos Avilés, Minersa, Nestlé, Hiasa o Asebal.

Las patronales destacaron a través de la Asociación para un Gas Industial más Competitivo (Gasindustrial) que la industria acapara el 62% del consumo gasista nacional con una factura anual de 4.700 millones de euros. "Desde hace ocho años, la competitividad del gas español ha empeorado progresivamente para todo tipo de consumidores industriales, llegando a precios entre un 20 y un 25% más altos que el de sus competidores europeos", señaló el nuevo lobby empresarial, que añadió que "en cuanto a costes regulados, los peajes están en España un 45% por encima de los de la media europea: los industriales españoles pagan aproximadamente el doble que los franceses, el triple que los británicos y, en algunos casos, hasta seis veces lo que los alemanes". La alianza de patronales industriales señaló que ese diferencial de precios "lastra la competitividad" y solicitó a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que ha asumido las competencias en materia de peajes y retribución del sistema gasista, que "erradique" esa "desventaja".

El precio del gas se suma a los argumentos que maneja Arcelor-Mittal para justificar el recorte de 700.000 toneladas anuales de acero en Asturias (el 16% de la producción de 2018). La medida, que está incluida en un paquete de recortes de más de 3 millones de toneladas en plantas de la UE, fue rechazado por el comité europeo de la multinacional, reunido ayer en Luxemburgo. El comité, tras escuchar las aportaciones del asesor independiente, puso en duda los motivos que maneja Arcelor para aplicar el tijeretazo y demandó que el ajuste se reparta entre plantas y no se concentre en Asturias, Cracovia (Polonia) y Tarento (Italia).

Importaciones. La multinacional destacó como principal motivo del ajuste la presión de las importaciones de acero procedentes de países extracomunitarios, que aumentaron el 12% el año pasado según Eurofer, pero desde el comité europeo se apuntó que ese argumento "pierde peso" si se tiene en cuenta que la propia Arcelor-Mittal está incrementado la importación de desbastes fabricados en Rusia, Ucrania y, sobre todo, Brasil, desde donde llegan barcos a los puertos de Asturias. "En los dos primeros meses del año se desembarcaron en Europa 400.000 toneladas de desbastes fabricados por Arcelor en Brasil, lo que supone el doble de otros años", señaló José Manuel Castro, miembro del comité europeo por CC OO.

Emisiones. Arcelor-Mittal sostiene que también le afecta el incremento de los costes del CO2 con el endurecimiento del mercado europeo de emisiones. El asesor del comité europeo argumenta que, de momento, la multinacional tiene excedente de derechos gratuitos y que incluso puede hacer negocio con los derechos sobrantes al subir el precio.

Coste eléctrico. El comité europeo también pone en duda que existan las diferencias de precio entre países que denuncia Arcelor y que publica Eurostat. "Asistimos a una teatralización para presionar a gobiernos y en negociaciones colectivas", afirmó Castro. El comité, además, se opuso a emitir un dictamen sobre la venta de activos de Arcelor a Liberty por falta de información.

Compartir el artículo

stats