El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el primer ejecutivo y accionista hegemónico de ArcelorMittal, Lakshmi MIttal, pactaron esta semana intensificar los contactos entre distintos departamentos del Ejecutivo y la dirección de la multinacional para hacer un seguimiento conjunto de la crisis del acero y de sus repercusiones en España. Sánchez y Mittal mantuvieron un encuentro en la Moncloa el pasado jueves para examinar las dificultades que atraviesa la siderurgia y los desafíos que encara dentro y fuera de España.

Según fuentes cercanas a la reunión, en ella se abordaron cuestiones como el precio de la energía y la necesidad de que el próximo Ejecutivo central apruebe cuanto antes el llamado Estatuto de la Industria Electrointensiva. Sánchez reafirmó asimismo el compromiso de España de defender en la UE la creación de un arancel ambiental (ajuste fiscal en frontera) para hacer frente al riesgo de cierres y deslocalizaciones por el endurecimiento a partir de 2021 de las políticas para reducir las emisiones de CO2.

De acuerdo con la misma información, Sánchez y Mittal acordaron establecer un marco estable y más estrecho de relación entre el Gobierno y la multinacional, con la implicación de los Ministerios de Industria y Transición Ecológica.