El juzgado de primera instancia número cinco de Oviedo ha estimado la demanda de una familia de Cangas del Narcea que pedía la nulidad de una compra de acciones del Banco Popular, realizada durante la ampliación de capital de 2016 por valor de 152.555 euros, cantidad que los inversores perdieron íntegramente tras la caía de la entidad y su venta al Grupo Santander por un euro en junio de 2017. El fallo conlleva el derecho de la familia demandante a la recuperación del dinero, según ha informado el despacho jurídico que llevó el caso, Vallverdú Abogados.

Se trata de uno de los casos de mayor cuantía entre los que han trascendido en Asturias ligados a la crisis del Popular: La sentencia determina lo siguiente sobre la situación de banco: "No cabe sino concluir que lo afirmado en el folleto informativo (de la ampliación de capital) acerca de la solvencia, rentabilidad y beneficios de la entidad contrasta con la evolución de los acontecimientos que llevaron en un escaso margen de tiempo a la caída del valor de los títulos, la retirada masiva de depósitos, la intervención de la entidad, la amortización de las acciones, con la completa pérdida de todo su valor económico y la venta final del Banco por un precio simbólico". De ello deduce el juez que "la imagen de solvencia publicitada y divulgada no se correspondía con la situación económico financiera real, pues de haberse reflejado en sus cuentas la realidad respecto a sus activos morosos e inmobiliarios (...), los resultados de los ejercicios de 2015 y 2016 hubieran sido muy distintos, con sustanciales pérdidas".