El gigante de internet Alphabet, matriz de Google, obtuvo un beneficio neto de 34.343 millones de dólares en 2019, un 11,7 % más que el año anterior, cuando la compañía logró 30.736 millones.

La empresa anunció este lunes tras el cierre de la Bolsa de Valores de Nueva York que en el último ejercicio fiscal sus ingresos ascendieron a 161.857 millones de dólares, un incremento del 18,3 % con respecto a los 136.819 millones facturados en el ejercicio fiscal de 2018.

Por primera vez y en un cambio significativo de la estrategia de comunicación de resultados, Alphabet desglosó los ingresos por segmentos, que incluyeron de forma aislada dos de los productos que más interés generan de cara al futuro de la compañía: YouTube, que facturó 15.150 millones de dólares, y Google Cloud, que logró ventas por valor de 8.920 millones.

Durante los pasados doce meses, los inversores de Alphabet se embolsaron 49,59 dólares por título, frente a los 44,22 dólares de hace un año.

Durante este tiempo la compañía de Mountain View (California, EE.UU.) ha aumentado su deuda a largo plazo de los 4.012 millones con los que cerró diciembre de 2018 a 4.554 millones actuales.

Los de hoy fueron los primeros resultados desde que los fundadores de Google, Larry Page y Sergey Brin, renunciaron a sus puestos al frente de la compañía en diciembre pasado, Page como consejero delegado de Alphabet, y Brin como presidente.

El cargo de Brin en Alphabet, que era fundamentalmente honorífico y de representación, desapareció, mientras que a Page le sustituyó Sundar Pichai, quien entonces ya ejercía como máximo responsable de Google y que trabaja para la compañía desde 2004.

"Nuestras inversiones en inteligencia artificial, computación ambiental y en la nube nos dan una base sólida para el crecimiento continuado y abren nuevas oportunidades en todos los departamentos de Alphabet", indicó Pichai al presentar las cuentas este lunes.

Pese al crecimiento experimentado, los resultados de Alphabet estuvieron por debajo de lo esperado por los analistas, y sus acciones se dejaban un 5,10% hasta los 1.409,86 dólares por título en las operaciones electrónicas posteriores al cierre de los mercados en Wall Street.