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EDP negocia la venta de la central de gas de Castejón, en Navarra

Un grupo inversor se interesa por adquirir dos ciclos combinados semejantes a los que la multinacional lusa tiene en Asturias

Imagen nocturna del primero de los ciclos combinados de Castejón tomada en 2003, pocos meses después de su inauguración.

Energías de Portugal (EDP), compañía hegemónica en el sector eléctrico asturiano, está en conversaciones con un grupo inversor que ha mostrado interés por la compra de la central de ciclo combinado (térmica alimentada por gas natural) que la multinacional lusa tiene en Castejón, Navarra. Se trata de dos grupos de generación de características parecidas a las de los que, con misma tecnología, tiene la propia EDP en la localidad asturiana de Ribera de Arriba.

Según fuentes conocedoras de los contactos, directivos de EDP han comunicado a mandos de la central navarra la existencia de un potencial comprador cuya identidad no ha sido desvelada a la plantilla por los acuerdos de confidencialidad. Técnicos de la empresa interesada han visitado estos días la central de Castejón para recabar información sobre el terreno antes de formalizar una oferta.

La operación encaja con el plan de negocio que está desplegando la dirección que preside Antonio Mexia, que incluye una apuesta por las energías verdes y un proceso de "rotación de activos", tecnicismo con el que se ha bautizado un plan para liquidar instalaciones que no se consideren estratégicas, entre ellas las térmicas de gas y de carbón situadas en España y Portugal. La venta de centrales carboneras es una opción muy improbable, dada la apuesta de los gobiernos de ambos países ibéricos por una descarbonización rápida del sector eléctrico: el Ejecutivo español de Pedro Sánchez prevé el cierre de todas las térmicas antes de 2030 y el luso de Antonio Costa tiene el propósito de que dejen de funcionar en 2023. Según las fuentes técnicas consultas, sí es verosímil que pueda salir adelante la enajenación de centrales de gas natural, llamadas a mantener en los próximos años un protagonismo relevante en el sistema como respaldo (potencia firme) de las energías renovables.

El complejo de Castejón está formado por dos grupos de generación: uno tiene una potencia neta de 429 megavatios y entró en operación comercial en septiembre de 2002, siendo el primer ciclo combinado promovido por EDP (más propiamente, en un principio fue promovido por Hidroeléctica del Cantábrico, antes de convertirse en filial de EDP en 2001); el segundo grupo tiene una potencia de 418 megavatios y entró en servicio en 2018. La capacidad productiva del conjunto de la central es semejante a la de los dos ciclos combinados de Ribera de Arriba (426 y 428 megavatios), que entraron en servicio entre 2008 y 2010.

Las centrales de gas de EDP en Navarra y Asturias tuvieron un grado de utilización muy bajo después de 2010, como ocurrió con todos los ciclos combinados del país, por la caída de la demanda y al exceso de capacidad de generación instalada en España. En 2019 su funcionamiento se disparó al hilo del retroceso de las térmicas de carbón en el mercado eléctrico, desplazadas debido al coste de los derechos para emitir CO2 y al bajo precio del gas natural. El conjunto de las planta alimentadas por gas que EDP tiene en la Península Ibérica elevaron su producción el 91% en 2019.

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